Para los niños que pasan por estas situaciones no sirven los discursos sino los actos y que tengan continuidad, lo bueno es que haya el mejor arreglo entre los padres para continuar de la mejor manera con la vida cotidiana.No es bueno que los padres corten sus actividades para estar más con ellos ya que eso si puede hacer que noten la diferencia.
Luego del divorcio debemos comprender que el niño tiene que acostumbrarse a dos estilos de vida, distintas costumbres las que serán decisivas en la crianza que no debemos olvidar que aunque haya una separación en la pareja para ellos siempre seremos sus padres.
Debemos también de pensar que estas experiencia puede ser también productivas ya que las pérdidas son un constante a lo largo de la vida y puede ser de gran ayuda para la comprensión de lo que vivan de ese momento en adelante.
No usar a los hijos de rehenes y que no asistan a nuestras discusiones ya que siempre se tendrán encuentros por que por más que nos separemos los temas que incumben a los hijos nos seguirán uniendo por el resto de nuestras vidas. Así que por ellos hagamos el esfuerzo y tratemos de que esta etapa de su vida sea lo más normal posible.
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